Sucedió hace poco. . .en una tarde lluviosa estaba haciendo reflexiones sobre el amor.
Sin quererlo mis ojos se posaron en la fotografía de mi gran amor.
Después en el crucifijo que tenía muy cerca de mí. . . roto!!!. Inevitablemente recordé aquel día cuando cegado por la ira, lo destrocé.
fueron tantas veces las que le pedí a aquel cristo que me mira, que aquella mujer fuera buena, que me amara como yo la amaba, que fuera mía para siempre y así se cumplieran mis ilusiones, pero un día. . . un amargo día, con la esperanza de volcar en ella todo mi amor, la sorprendí en brazos de mi mejor amigo. . .
Corrí desesperado, no sé como llegué a mi casa, comencé a gritar y a destrozarlo todo, y cuando llegue al cristo, lo tomé con furia, lo arroje al suelo, diciendo: “Tú tienes la culpa!!!, ¿cuántas veces te pedí que me permitieras conocer el verdadero amor???, mira me ahora con el alma rota!!”
No sé si fue un sueño, un milagro o no sé qué, el caso es de que aquel cristo moribundo y roto brotaron estas palabras. . .” Hijo mio, ahora más que nunca te amo, porque estás tan indefenso, tan débil, confundido. . . La prueba es grande pero mi amor por ti es más!. Morí en la cruz por aquellos que como tú son como la nube. . .Sigue mis pasos y entre más sufras, mayor será tu recompensa. ..”
Comencé a temblar, me arrodille, tomé al cristo roto en tre mis manos y lloré como niño. . .
Perdona me Dios mio, Perdona me!!!
Una luz intensa brilló, de desvanecí, al despertar me di cuenta que todo lo que había tirado estaba en su lugar, y en la pared aquel cristo roto que me miraba y sonreía con dulzura. .
Hoy ha pasado el tiempo, es verdad, cristo ha borrado de mi mente la amargura y el deseo de vengaza. .
He vuelto a creer en el amor, y cuando siento debilidad. . .
Mi cristo roto me consuela, lo contemplo y le digo. ..
Gracias. . Gracias Señor!!!
Lo siguiente fué dicho por Audrey Hepburn, a quien se le solicitó compartiera algunos trucos de su belleza...
Sam Levenson, un humorista y estrella de la comunicación, escribió este texto para el día del nacimiento de su nieta, porque temía que debido a su edad no pudiera decírselo cuando fuera una señorita.
Para labios atractivos, hable con la voz de la calidez...
Para ojos adorables, mire lo bueno en la gente...
Para una figura delgada, comparta su alimento con el hambriento...
Para un cabello hermoso, deje que un niño o niña deslice sus deditos por él, al menos una vez al día...
Para una buena estampa, camine con el conocimiento que nunca camina sóla...
La gente, aún más que las cosas, necesitan ser restauradas, revividas, solicitadas y redimidas; nunca abandone a alguien...
Recuerde que si usted necesita una mano amiga, la encontrará al final de sus propios brazos.
A medida que envejezca descubrirá que Ud. Tiene dos manos: Una para ayudarse a sí misma y otra para ayudar a los demás...
La belleza de una mujer no radica en la ropa que usa, la figura que posee o la manera en que peina su cabello...
La belleza de una mujer debe ser vista mirando a sus ojos, porque éllos son la puerta a su corazón, a su alma, el lugar donde el amor reside...
La belleza de una mujer no está en su cara, porque la verdadera belleza en una mujer se refleja en su alma...
Es el cuidado que amorosamente brinda y la pasión que ella muestra...
La belleza de una mujer crece con el paso de los años...